Un profesional de la salud debe adquirir competencias comunicacionales a lo largo de su formación de grado de un modo progresivo y gradual. Dichas competencias se entienden como las habilidades y destrezas que posibilitan la participación adecuada en situaciones comunicativas específicas. Desde una perspectiva interdisciplinaria, y especialmente desde los aportes de la Antropología al campo de la salud, se considera que el proceso salud-enfermedad articula prácticas, significaciones, creencias y valoraciones propias de los diversos conjuntos sociales. En este sentido, la comunicación en el área de la salud pone en diálogo dos perspectivas diferentes: la de los médicos y la de sus pacientes.
El objetivo de este trabajo fue estimar el aporte de la evaluación de competencias comunicacionales orales, desde la asignatura Antropología y Epistemología, en estudiantes de la carrera de Medicina. Este estudio se desarrolló desde una perspectiva metodológica mixta. A partir del análisis de los resultados se puede visualizar que los estudiantes de los primeros años de la carrera autoperciben que poseen un muy buen nivel de habilidades y destrezas comunicacionales orales. Dicha percepción se modifica en los últimos años de cursado.
Para los estudiantes el abordaje de las competencias comunicacionales orales está presente esencialmente en las materias humanísticas y en las instancias en las cuáles la comunicación se pone en juego en el encuentro con otros: las prácticas preprofesionales y el voluntariado. Los estudiantes otorgan un valor muy positivo a la formación en las instancias prácticas y las reconocen como oportunidades de vivenciar y poner en acto aspectos vinculados a la comunicación. En sus relatos, la pandemia se asocia con una limitación en su formación.